Última salida del año por la manga con Salva y mi cuñado. Día que en principio iba a ser tranquilo, pero el viento del norte montaba bastante corriente. A primera hora algo de curri buscando bonitos sin éxito. Luego unas caballitas con las plumas, y a partir de las 11 nos fuimos a los pulpos. 4 buenos, dos indultados y tres escapados. Buena compañía y buenos cordiales. A ver si el 2020 es algo mejor, aunque no me puedo quejar demasiado, solo por los calamares...